Las personas que han sobrevivido a una descarga eléctrica pueden hacer frente a los desafíos médicos, financieros y emocionales graves.
Para las familias que han perdido un ser querido como consecuencia de accidentes de electrocución, los costos emocionales y financieros pueden ser abrumadoras.
Víctimas de accidentes de electrocución y sus familias incurren inmediata, a veces a largo plazo, las facturas médicas. Ellos han sufrido lesiones por descargas eléctricas resultantes de accidentes de trabajo, productos peligrosos o defectuosos, peligrosos… De acuerdo con OSHA, las causas más comunes de accidentes de electrocución en los sitios de construcción son:
- El contacto con líneas eléctricas;
- La falta de protección de falla a tierra;
- Conexión a tierra incorrecta del equipo eléctrico;
- Si no se siguen las instrucciones del fabricante
- El uso inapropiado de extensión y cables flexibles.
La gravedad de la lesión sufrida por un trabajador de la construcción involucrado en un accidente eléctrico depende de varios factores:
- El tiempo que la persona está expuesta a la corriente eléctrica;
- La cantidad de corriente que fluye a través del cuerpo;
- El camino de la corriente a través del cuerpo;
- La presencia de humedad en el ambiente (incluso el sudor en la piel del trabajador puede ser un conductor);
- El voltaje de la corriente;
- La fase del ciclo cardíaco cuando se produce el choque;
- La salud general del individuo.
Condiciones físicas a largo plazo pueden permanecer después de los accidentes de electrocución, tales como:
- Las lesiones cerebrales;
- Daño en el nervio;
- Problemas del corazón;
- Daño en los órganos permanentes;
- La visión, la audición o déficits de habla;
- Desfiguración corporal de quemaduras.